
EL hidrógeno verde se considera como el mejor invento de los últimos años para reducir los daños producidos por el llamado efecto invernadero.
El objetivo marcado por países de todo el mundo es la completa descarbonización del planeta para el año 2050, pero el aumento de la demanda energética global se estima que será de un 30% hasta 2040, lo que hace más difícil que se pueda cumplir este objetivo. A día de hoy nuestras economías dependen del petróleo y del carbón, por lo que ese aumento de la demanda significaría un aumento de las emisiones de CO2. Por eso el hidrógeno verde se posiciona como una de las mejores alternativas para combatir dichas emisiones. Desde Arsinger queremos explicarte algunos de los beneficios que reporta el uso de esta tecnología para reducir las emisiones.
¿Qué es el hidrógeno verde?
El hidrógeno verde se obtiene a través de un proceso conocido como electrólisis para generar hidrógeno. Mediante la corriente eléctrica se separa el hidrógeno del oxígeno del agua. Si se obtiene de una fuente renovable seremos capaces de obtener energía sin emitir dióxido de carbono a la atmósfera.
Pero esta no es la única manera de producir el hidrógeno verde ya que también se puede obtener a partir de la energía solar mediante la fotoelectrocatálisis, un proceso eficiente y renovable al 100%. También se están desarrollando tecnologías para la obtención de hidrógeno verde a partir de biometano. Este se utiliza como materia prima obtenida a partir de los residuos sólidos urbanos.
Beneficios de su utilización
El hidrógeno es el elemento químico con más presencia en la naturaleza, además, es utilizado como combustible, siendo este ligero y muy reactivo.
Su demanda como combustible ha venido aumentando en los últimos años llegando a consumirse 70 millones de toneladas al año.
Esta fuente de energía es completamente limpia, ya que solo emite vapor de agua por lo que no dejará ningún tipo de residuo en el aire, como si lo hacen el carbón y el petróleo.
El uso de este combustible ha sido generalizado desde principios del siglo XIX en la industria. El hecho de que cada vez sea más urgente la descarbonización del planeta hace que tenga un mayor protagonismo el uso de este combustible que genera cero emisiones. Según el Consejo Mundial del Hidrógeno estamos, sin ninguna duda, ante el combustible del futuro.
El hidrógeno verde es 100% sostenible, ya que no emite ningún tipo de gas contaminante en ninguno de sus procesos. Es fácil de almacenar haciendo que se pueda utilizar en cualquier momento. Su versatilidad hace que pueda transformarse en electricidad o combustibles sintéticos. Otra ventaja añadida al hidrógeno verde es que su transporte puede realizarse por los mismos medios por los que se realiza el del gas natural.
Compromiso de Arsinger con el hidrógeno verde
En Arsinger siempre buscamos aportar nuevos métodos y desarrollos para futuros proyectos relacionados con las energías renovables. Por eso siempre hemos apostado por la innovación para conseguir una mayor sostenibilidad, y no podíamos dejar pasar la oportunidad de poner nuestro granito de arena para combatir el cambio climático a través de la descarbonización. Nuestra división de I+D+I es la encargada de desarrollar nuevos métodos para que la obtención de la energía que tanto necesitamos sea cada vez más limpia, y con el hidrógeno verde conseguiremos reducir las emisiones de dióxido de carbono tan perjudicial para nuestro planeta.
Nuestros proyectos de investigación están relacionados con las nuevas tecnologías que nos ayudan a mejorar la eficiencia como reflejo del sincero compromiso de nuestra compañía con el respeto y cuidado del medio ambiente.
Puedes ponerte en contacto con nosotros y contarnos el proyecto que tengas relacionado con el hidrógeno verde y estaremos encantados de ayudarte.